miércoles, 29 de septiembre de 2010

Pretérito Imperfecto


El pretérito imperfecto en las bocas

que acaban de callar es sólo el zumo

ácido del limón en las papilas,

la sal en los ojos, en las pupilas,

el humo que no deja respirar.

Es el corazón latiendo fuerte en el estómago.

Haces de tripas músculo latente

cuando bombeas lejía en las venas

y la calma tormentosa refrena

el ánimo del presente.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Primer poema en Madrid

Dime qué harán los ojos de las chicas

llorando por los metros, cabalgando

por oscuros y vías. ¿Deberían

biengastar tan mal sus ojos felinos,

grandes y desnudos? ¿No deberían...?

Quizá lloren por sus rotos labios mal pintados.


Regresan a casa en azul de otoño

cuando los cuervos graznan sus hazañas,

cuando el universo vuelve a girar

matutino, inadvertido, aburrido...

¿Puede que sea él el empalagoso

llorón harto de mi primer poema en Madrid?


No puede ser Él, tampoco fui Yo...

Ellas, ellas o quizás también tú.

Lloran, lloráis porque esta triste noche

no han gastado vuestros labios, no han

arrañado vuestros ojos, no habéis

abrazado, desnudado... follado;

miércoles, 1 de septiembre de 2010

La ciudad

La ciudad es el refugio del anonimato,

las caras detrás de las ojeras se reservan

el sustantivo, las arrugas, el calendario;

Los cines y los teatros son el arrebato

de mis ojos de cristal y montura que observan,

por serenos pasos de cebra al lobo estepario.



Los coches rezan el insulto y el abecedario

al parpadeo del semáforo, a la duda

de un peatón (corbata negra y maletín de cuero),

que mira como grita la aurora su rosario,

con la garganta rota, una voz peliaguda;

piensa en el frío de su cartera bajo cero.



La vida vuelve a casa por el largo sendero,

por el camino a su calvario de disimulos

y horarios, por las manillas del reloj que esperan

volver a ser importantes para el usurero

que es el tiempo, cuando noble absuelve con sus bulos

mis dedos tiernos, que por arañarlo se esmeran.