lunes, 29 de abril de 2013

Poema de amor



Esto no es un poema de amor, 

así que puedes follártelo. 

Esto no es un poema de amor 

porque quien lo quiso, 

lo dejó tirado a un lado.

miércoles, 24 de abril de 2013

Los más exquisitos velos



No somos dueños del tiempo 

pero podemos parar las agujas de los relojes, 

no conocemos la posición de los electrones 

pero erigimos duras casas de cemento. 

No entendemos la causa última, 

ni la mirada del gato, 

ni la lengua que hablan los delfines. 

No conocemos las privadas habitaciones del olvido, 

ni el vientre de los volcanes, 

ni las migraciones de los pájaros. 

No sabemos nada de los dioses, 

ni de los juegos de manos de los magos, 

tampoco de la secreta pasión de los amantes. 

Pero aún así construimos las palabras 

y las vestimos con los mas exquisitos velos, 

con ellas hicimos versos 

que nos hicieron vislumbrar las más íntimas verdades.

viernes, 19 de abril de 2013

Guárdame un segundo



Ten un jardín con columpio, 

un huerto, una enredadera 

que escale por tus piernas, 

un patio para pasar la primavera, 

una buhardilla, una chimenea, 

un baño completo con bañera. 

Ten un novio, un consorte, 

un marido, un compañero. 

Me vale cualquiera 

que te lleve del sofá a la cama, 

que sepa de cocina, 

que beba café, que le guste el cine. 

Ten hijos, ¿cuántos quieres? 

Ponle a la primera aquel nombre 

que tan bien rima con el Sena, 

llévala a la escuela de la mano, 

vela pasar la varicela, 

despliega sus alas, mira cómo vuela. 

Ten un coche, un anillo de casada, 

una casa con puerta de madera, 

álbumes de fotos, aniversarios, 

nochebuenas, cumpleaños, 

noches de vino, 

discusiones tontas. 

Ten, toma todo lo que esté a tu alcance, 

pero guárdame un segundo 

antes de que te lo arrebate el sueño cada noche 

para poder cruzar por tu mente de puntillas, 

o regálame alguna que otra madrugada 

en la que despiertes aturdida, 

antes de que den las seis de la mañana, 

para hacerte recordar que a esa hora, 

es la hora en la que se besan los amantes, 

para amontonar nuestras cenizas 

antes de que se las lleve el viento.

martes, 16 de abril de 2013

Fóllame





Escrito a cuatro manos con Marina Alcolea. 




Por qué no escribes un verso 

y me desnudas con tus palabras 

las exprimes, las moldeas, me decoras, 

me acaricias lentamente entre metáforas.



Por qué no pules con ellas 

aquel lunar que te disgusta, 

o me llenas el cuerpo de heridas de guerra, 

o me enseñas cómo besar al poeta. 




Por qué no me muerdes el alma 

hasta que sangre 

y me atas a tu verbo, 

y lames mi corazón en carne viva. 



Quiero aprender la lengua de las musas 

para que me vistas de adjetivos, 

para darme el lujo de perder los papeles 

y aún así no quedar mudo. 



Quiero quitarte los escudos, 

los pronombres posesivos 

quiero convertirte en un poema 

escrito en verso libre. 



Construirlo a cuatro manos 

y que salga de dos bocas, 

conjurarlo usando los imperativos, 

los plurales, las primeras personas. 



Quiero aferrarme a su poesía, 

beber de la tinta que tatúa 

tu piel en mi memoria 

para desgranar así su encaje, 

para llenarme las manos 

de las paradojas que se extienden 

por sus latitudes, para comprender 

el giro del engranaje de tus agujas. 



Esta noche te dejo fumarme a caladas profundas 

llenarte de mi los pulmones, 

hacerte entender lo que pienso: 

el amor es un suicidio inconsciente. 



Esta noche voy a tocar todas tus teclas 

para memorizar todos sus sonidos, 

para interiorizar el eco de nuestros pesos muertos 

colgando de la soga, 

o experimentar la música de una hoja de afeitar 

vibrándonos por las muñecas. 



Escribir 

como amar 

es atreverse a saltar 

al vacío. 




Léeme este poema con las manos. 

Oblígame entre susurros, 

grita como la más puta de las musas, 

mírame a los ojos y recita un exquisito: 



fóllame.


domingo, 14 de abril de 2013

Dame un toque



Si a la hora de dormir 

vienen los fantasmas 

dame un toque, 

que yo repararé tus sueños 

con ungüentos primigenios 

y los lustraré con aceites esenciales 

para que parezcan nuevos. 

Puliré los desperfectos, 

correré con los gastos, 

limpiaré los cristales 

para que veas con claridad 

que no existen los monstruos. 

Pero quizá deje alguna muesca 

imperceptible entre tus labios 

para rubricar el remiendo, 

quizá te ponga algún lunar 

que encaje con alguno de los míos 

para firmar la obra. 

Y es que a los artesanos, 

al igual que a los poetas, 

les gusta deja su huella 

para que nadie se olvide 

de los aciertos o desconciertos 

que construyen con sus manos.

domingo, 7 de abril de 2013

Pregúntame dónde quiero ir II (o el otro lado del espejo)



Me he sacado de la cama, 

y he salido a bailar. 

Te he girado la cara, 

dándote mis labios. 

Me he afirmado tres veces 

y he matado a todos los gallos. 

He cerrado mis piernas 

pero he abierto los botones de tu camisa. 

Te he esperado en la ducha, 

he perfumado con aromas 

de café y tostadas la cocina. 

No he guardado nada en tu maleta, 

ni me ha hecho falta contar hasta seis, 

tampoco he desmembrado el abecedario. 

He pintado mis paredes, 

ordenado los libros de mis estanterías, 

bendecido todas las filmotecas 

y por mi oído han pasado las lenguas 

de todas las voces que suenan en mis discos 

porque ellos no son los culpables. 

No he rezado por nadie, 

ni he dado ningún paso en falso, 

no he caído contigo 

porque no hay paradas de metro equivocadas. 

He dormido. 

Y he despertado 

para escaparme. 

Me he preguntado dónde quiero ir, 

y me he reconocido 

en una terminal de aeropuerto. 

He vuelto 

olvidando todos los códigos postales 

que escribí en la palma de tu mano. 

Mirándome al espejo 

he apartado todas tus palabras, 

disponiéndolas 

para cimentar poemas o derrocar dictadores, 

para formar ciudades y monedas. 

Con todas las que han sobrado 

he enviado postales 

y construido historias. 

Las he leído. 

Y no he vuelto a la cama, porque nunca es tarde.

miércoles, 3 de abril de 2013

Proposiciones adversativas

Todo cuando pueda hacer,
amor (o lo que seas), será poco:
o renacerá en mí tu borboteo
o estaré solo.
Carlos Piera

Si fuese un loco y tú una loca, 

me dormirías por las noches 

con tus caleidoscópicas sentencias, 

y yo bailaría por tu habitación 

mientras arranco los cuadros 

y pinto tus paredes. 

Los bares no serían fotografías borrosas, 

tu cuerpo estaría lleno de mis tatuajes 

y el mío de tus moratones, 

no quedarían en el mapa de tus labios 

terrenos que no hubiese explorado ya el whisky 

con el que regaríamos todas las flores que no se han roto. 

Si yo fuese un loco, 

asaltaría tus trenes 

para prenderle fuego a todos los vagones. 

Si tú fueses una loca, 

mis condicionales llenarían de tildes 

todas las frases que no dejaríamos a medias. 

Si yo fuese un loco y tú una loca, 

no seriamos gatos disecados en lo alto 

de las estanterías, 

y las ganas que tenemos de negarnos 

serían amantes pasajeros que no saben 

de proposiciones adversativas.

martes, 2 de abril de 2013

64 casillas en blanco



Minino de Cheshire, ¿podrías decirme, por favor,
qué camino debo seguir para salir de aquí?
Lewis Carrol



He dado tantos pasos en falso 

que al girarme no he visto 

huellas en mi camino, 

estoy en alguna parte del mapa, 

sin agua, ni brújula, 

perdido entre sus latitudes. 

Sin hoja de ruta, 

en algún lugar sin cartografiar, 

indefinido. 

Sin saber si el siguiente paso 

me llevará a otra casilla 

o me dejará en el mismo punto. 

Preguntándome cómo salir de aquí 

si no estoy en ningún sitio.